Los compradores y los vendedores tienen objetivos opuestos cuando se trata de la venta de una casa. Lo que uno trata de conseguir suele ser diametralmente opuesto a lo que el otro desea: el primero suele querer gratis la propiedad, mientras que el otro quiere venderla al mayor precio. Sin embargo, comparten el mismo objetivo final. Quieren una venta. Ambas partes pueden beneficiarse significativamente de la contratación de un agente inmobiliario que les ayude, pero sus razones pueden ser diferentes.

El dinero

Cuando pongas tu casa en venta por supuesto, querrás conseguir lo máximo posible. Por ello, puede que pienses en desprenderte de comisiones adicionales. Pero un estudio de 2017 indicó que las ventas directas por el propietario obtuvieron un 30% menos que las propiedades puestas en venta por un agente.

Una inmobiliaria cuenta con más experiencia

Si eres el vendedor, sabes exactamente cuánto quieres por tu casa, pero… ¿es razonable el precio al que has llegado? Una inmobiliaria es experta en hacer análisis comparativos. Una inmobiliaria estará atenta a cuestiones que quizá no se te pasen por la cabeza, como problemas con el agua, la cimentación, los acabados, sistema eléctrico… De nuevo, esta experiencia y conocimientos pueden acabar ahorrándote miles de euros en el futuro.

Ahorro de tiempo

Vender una casa puede ser un trabajo a tiempo completo. Tendrá que responder a las llamadas de los compradores interesados, decidir dónde quiere anunciar las jornadas de puertas abiertas y otras mil cosas que conducen a la venta final. La tarea de una inmobiliaria es ocuparse de todas estas cosas exactamente.

Se encargarán de la documentación

Cuando se trata de revisar y comprender los múltiples documentos que intervienen en una operación inmobiliaria debes entender bien en qué te estás metiendo independientemente de que estés comprando o vendiendo. Por suerte, una inmobiliaria estará mucho más familiarizada con todo este papeleo. Algunos errores u omisiones en estos documentos pueden costarte tanto como esa comisión que intentabas evitar pagar, o incluso mucho más.

Una inmobiliaria es experta negociando

El trabajo de su agente es conseguirle el mejor precio posible por su casa, o asegurarse de que obtenga la mejor oferta posible en la propiedad que desea comprar. Los agentes están capacitados para negociar bien, aunque solo sea por experiencia. Saben lo que normalmente funciona, lo que no. No tienen ningún interés emocional que pueda nublar su pensamiento.

Si tras conocer las ventajas de una inmobiliaria se decide a trabajar con una, no dude en ponerse en contacto con nosotros. Nos encargaremos personalmente de asesorarle para que consiga la mejor operación.